miércoles, junio 27, 2007

Los recuerdos

Me encantan los recuerdos. Suelen ser un objeto absurdo o inservible, pero algo irreemplazable. Te hacen revivir sensaciones, experiencias de mucho tiempo atrás, felices en su mayoría, y te hacen recordarlas mucho mejor de lo que fueron en realidad. Incluso los recuerdos de sufrimientos son buenos. Tienen un extraño poder que hace que valores los malos momentos como valiosos también. Qué curioso, ¿verdad?
Y lo mejor de los recuerdos cuando son objetos es que da igual que se rompan, cuando pasa el tiempo, esa rotura hace ese recuerdo único.
Pero los recuerdos más valiosos sin duda son los que recuerdas solo tú, los que pasan por tu cabeza y te pones a sonreír o soltar una carcajada pareciendo una chalada.
O a lo mejor todo esto solo me pasa a mí., lo que hace aun más especiales los recuerdos para mí.

jueves, junio 14, 2007

Eva


Se llamaba Eva, y era bastante solitaria. No es que fuera una marginada, simplemente, prefería estar sola. Decían que tenía amigos, pero lo cierto es que solo eran conocidos, ya que no podía confiar en ellos, y ellos no confiaban en Eva. Nadie la conocía porque nunca dejaba ver sus sentimientos, siempre los ocultaba, al igual que su forma de ser y sus pensamientos. No era feliz, pero tampoco infeliz, y eso le bastaba. Era todo un misterio.
Pero un día empezó a acercarse a la gente y dejar que los demás se acercaran. Entró en una época de cambios, que dejaron huella en su vida, tal vez porque fueran demasiado rápidos. Compartió sus tardes con los que poco a poco se fueron convirtiendo en sus amigos, y empezó a sonreír. Adquirió la costumbre de escuchar a los demás y empezó a hablar sobre ella misma, y dejó ver su verdadera forma de ser.
Incluso llegó a enamorarse. Sin embargo, este fue el principio del fin. Aunque era muy querida por todos, no fue correspondida en ese caso. Esto marcó un antes y un después, y comenzó una nueva decadencia. Tan pronto estaba bien como estaba mal. Estaba obsesionada, deprimida y con solo un pensamiento en mente. Intentó olvidarlo gracias a los que le rodeaban, pero era muy difícil y tenía muchos baches en su vida. Siguió intentando ayudar a los demás para poder olvidarse de sus problemas, pero estos la atormentaban por la noche. Hasta que ocurrió, se metió demasiado en la vida y problemas de una amiga, tanto que intentaba vivir a través de ella. Perdió a esa amiga y volvieron sus problemas. Era insoportable. Se estaba autodestruyendo.
Para ella solo había una solución. Volver a ser la de antes. Poco a poco fue perdiendo el contacto con la gente y aunque sus problemas seguían ahí, ya casi ni parecían reales. Ahora es como era antes, solo que con una sola diferencia. Sigue siendo solitaria y vive gracias a sus fantasías y sueños. Pero ahora que sabe cómo es la felicidad, hay algo dentro de ella que le duele todos los días. Son los recuerdos, los buenos, pero también los malos, que no la dejan dormir. Y esa parte de ella que sus amigos se llevaron, y esa parte de ella que sigue obsesionada con una persona, que nunca más volverá a ver.

lunes, junio 11, 2007

¿Engañan las apariencias?


La respuesta es sí, pero no sabemos realmente cuanto.
He llegado a la conclusión de que las personas tenemos muchas capas, el número depende de cada uno, pero siempre es alto. Conoces a una persona de vista, y te parece una idiota, una gritona que necesita ser el centro de atención, una hortera y una creída.
Pero de repente, cambia una circunstancia y empiezas a conocerla y te das cuenta de que es simpática y todo. Bueno, cualquier persona es maja si quiere. Pero pasa el tiempo y ganáis confianza y empezáis a construir una amistad muy rápido quizá. Sigue pasando el tiempo y recuerdas entre risas cómo la odiabas, quien te iba a decir a ti que acabaría siendo tu amiga.
Entonces toca la primera pelea, es inevitable. Tarde o temprano ves su defecto. El defecto. Que casualmente es el mismo que habías notado sin conocerla. Solo por eso la odiabas. Entonces surge un conflicto. ¿Es de verdad como la veía? ¿Puedo aguantar eso? Con una amistad de toda la vida ni te lo planteas, todo el mundo tiene defectos y has aprendido a soportarlo, sin embargo las nuevas amistades son más frágiles y aunque no queramos admitirlo, las rompemos por estupideces.
El resto depende de ese pequeño paso. Puedes volver a odiarla, de hecho es el camino más fácil, simplemente repetirte que siempre había sido así, pero lo había disimulado. O puedes aprender a aguantar ese error y seguir construyendo la amistad un poco más despacio, pero más sólida. Incluso se puede convertir en tu mejor amiga.
Entonces, ¿las apariencias engañan? Sí, pero parcialmente, nos iremos quitando capas durante toda la vida, más o menos gruesas, pero siempre ocultando algo nuevo. Yo solo digo que la primera impresión y apariencia no es siempre desacertada.

Dias de verano

Bueno, acabo de empezar las vacaciones, y aunque los primeros días he estado enfadada por diversos motivos y ocupada por muchas cosas, hoy he tenido un verdadero día de verano.
Qué gusto poder terminar de comer y poder plantearte si dormir la siesta plácidamente o ir al ordenador a hablar o ver una peli.
Qué gusto tener tiempo para actualizar tranquilamente el blog.
Qué gusto tener un disco nuevo sonando mientras lees una revista o un libro.
Qué gusto poder quedar con tus amigos tarde para estar simplemete sentados en un parque o quedar con ellos porque tienes un ataque de hiperactividad.
Estos son los detalles que de verdad aprecio.
Aaaaah.
Como me gustan los primeros días de vacaciones...